Cinco importantes eventos se han realizado en el Quindío en los últimos 30 días: El Festival Internacional de Teatro Calle Arriba, Calle abajo; el Festival de Artes; el II Encuentro Internacional de Mujeres Poetas, En el país de las nubes; el VII Encuentro Nacional de Escritores Luis Vidales, y desde ayer, se empezó la III Semana Literaria que organiza Relata.
Lo anterior es la fiel muestra que la cultura en el Quindío se mueve; desafortunadamente, para la mayoría de los medios de comunicación, estos eventos pasan desapercibidos, y no se dan cuenta de que en cada acto pasan protagonistas culturales del orden nacional e Internacional.
Pero no hablemos de quienes manejan la información, hablemos de quienes manejan la cultura en los municipios y el departamento, personajes que pocas veces se ven en la programación. La excusa es que “esta actividad no fue organizada por ellos”.
Se realizó el I Encuentro de actores del Paisaje Cultural Cafetero; de los inscritos, acudieron un ciento por ciento; desafortunadamente, el escenario escogido para esta actividad, que fue el Auditorio Euclides Jaramillo Arango de la Universidad del Quindío, se vio vacío. Ante esta situación, dos cosas se pueden leer: que no les avisaron a estudiantes y profesores, o que no les interesa.
Claro, que más que al estudiantado, la invitación debería ser más amplia, llámese sector gubernamental, turístico o empresarial, entre otros.
Cabe destacar que por allí sí estuvieron funcionarios de la Secretaría de Cultura de la Gobernación del Quindío; por los lados de la administración municipal, nos se vieron.
Hace más de una semana murió en Quimbaya el artista Silvio Gallego, quien se había especializado en el manejo del puntillismo y en la elaboración de obras con tornillos. Su muerte, como la vida de la mayoría de los artistas en el Quindío, pasó completamente inadvertida.